Por: Yanio Concepción
El derrumbe de la antigua vivienda histórica,
patrimonio arquitectónico, vernáculo de La Vega, donde vivió don Federico
García Godoy, y ubicado en el centro del casco urbano de La Vega, es un duro
golpe a los monumentos históricos de esta ciudad. Realizar esto, con la
advertencia de la autoridad de planificación urbana del ayuntamiento de La
Vega, es más que un desafío público que se debe investigar hasta las últimas
consecuencias.
Este monumento histórico está amparado
por la resolución No.37-91 de la gestión municipal del Ing. Euclides Sánchez
Tavares, emitida por la sala capitular del Ayuntamiento de La Vega, donde se traza
y se define los límites del área y centro histórico de la provincia de La Vega.
Posteriormente en la gestión municipal del Ing. Fausto Ruíz, se propone ampliar
la delimitación incluyendo otras viviendas que fueron cuna de reuniones de
grandes ilustres veganos.
El hecho de derrumbe ocurrió el 16 de
agosto a las 4 de la mañana, en plena transición de las autoridades municipales
de La Vega. Se sospecha que el actual propietario, residente en San Francisco
de Macorís, derribó el hogar del intelectual de Don
Federico García Godoy por oferta de una institución financiera de esta ciudad
de La Vega.
En esa casa,
Don José Bosch, padre del Prof. Juan Bosch, y otros intelectuales realizaban
tertulias, y en dos ocasiones Don Federico García Godoy, prestigioso
intelectual, crítico literario, periodista, político y educador, recibió la
visita del apóstol cubano José Martí, su amigo personal, quien en una ocasión
visitó a García Godoy acompañado del general Máximo Gómez, Nicolás Ramírez,
Francisco Borrero y Enrique Collazo. Este grupo de letrados partieron desde
Santiago de los Caballeros a pernoctar a esta casa de Federico García Godoy.
El valor histórico de los pueblos lo dejan los
hombres con su entrega y dedicación a casa justa. Esta destrucción de la casa
de Don Federico García Godoy, refleja el deterioro de una sociedad indolente a
los legados de hombre y mujeres que dieron su vida por esta patria, que se está
convirtiendo en un pueblo sin dolientes a los monumentos y las obras dignas de
proteger para la futura generación.
Las autoridades responsables de vigilar
y garantizar la protección del casco histórico y los patrimonios monumentales,
están obligadas a dar una respuesta a la población en torno a situaciones como
esta. Si no se ocupan de preservar la historia de su
pueblo, estaremos rumbo la inconsciencia social.
Estamos faltas
de dolientes y de una política social de protección de Patrimonio Arquitectónico
en La Vega, ya que se están destruyendo estos monumentos en la cara de las autoridades,
y sin historia no hay patria.
El solo
hecho de la presencia de José Martí en La Vega tiene un matiz histórico, y como
don Federico García Godoy 91857-1924) “el se fue a la labor ardua y penosa de
redimir a un pueblo, a la lucha resonante, rumbo a una muerte prematura y
gloriosa” respetar los hechos y monumento histórico nos reivindican de no
repetirlo.
El solo
recordar al orden de transito concedida al apóstol cubano y general Máximo
Gómez por el Gobernador Civil y Militar Santiago de los Caballeros, que decía.
CONCEDO “pasaporte a los señores Máximo Gómez, Enrique Collado, José Martí,
Francisco Borrero y Nicolás Ramírez, para que puedan dirigirse a La Vega por vía
de Santo Cerro, en sus monturas y a diligencias personales, Recomiendo a las
autoridades de tránsito, darles paso libre”, evidencia el hecho histórico en La
Vega y lo que representan ese monumento.
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